— Vivir es cambiar —
Desde pequeña me enseñaron a amar la vida.
La vida, esa magia que nace de la interacción de diversos
seres y elementos presentes en la naturaleza.
A la hora de elegir mi trayectoria profesional dejé de lado mi admiración por la naturaleza. Al finalizar mis estudios de Ingeniería Industrial, empecé a trabajar en una empresa y aquel gusanillo empezó a resucitar. Con el paso del tiempo, percibía aquel mundo cada vez con mayor extrañeza.
El equilibrio no existe, todo se está moviendo y cambiando continuamente, incluso nosotras. Eso es, precisamente, vivir.
El ruido de las excavadoras que empezaron a trabajar en Aralar me sacudió la conciencia y mis creencias e inquietudes más profundas comenzaron a aflorar. Conocí gente nueva en torno a aquel suceso y creamos una comunidad de cooperación, una familia. Fue un factor determinante para el cambio. Dejé la empresa donde había trabajado durante cinco años y decidí dar un giro a mi trayectoria profesional.
Porque el conocimiento se adquiere con tiempo y porque nunca es demasiado tarde. Tenía que intentarlo.
Después de concluir el Máster de Profesorado de Enseñanza Secundaria y haber desarrollado una investigación sobre los bosques y el cambio climático, tuve la oportunidad de emprender un nuevo camino relacionado con la sostenibilidad y el medio ambiente. Realizando labores de voluntariado y conociendo gente nueva, aprendí mucho y empecé a vivir experiencias extraordinarias. A partir de esas vivencias, me atreví a dar el salto y crear mi proyecto personal.
Poco a poco, y casi sin que me diera cuenta,
el micelio que había nacido en aquellas
vivencias, ya había empezado a expandirse.
En busca de inspiración, ven a casa:
Diversidad:
Nuestro mundo es diverso, en todos los sentidos, y eso nos enriquece: nos ayuda a cambiar y adaptarnos.
Complejidad:
Más allá de los seres vivos, los elementos y los procesos que posibilitan la vida, también la complejidad humana. Esa complejidad debe ser el punto de partida para la revolución.
Simbiosis:
En el mundo donde prevalece la diversidad y la complejidad, todo se basa en la interacción de distintos seres. Nos necesitamos mutuamente.
Cambio continuo:
En un mundo más cambiante que nunca, tenemos que transformar y adaptarnos continuamente. Al fin y al cabo, vivir es cambiar.
